Me siento observada,
unos ojos me miran desde la penumbra,
y en lugar de sentirme incomoda…
Me gusta…
Y mi alma vuela,
jugando con el viento,
haciendo un guiño,
con sonrisa descarada…
Y mis ojos buscan,
quien se esconde tras la cortina,
para que me muestre su alma.
Y mis labios pronuncian tu nombre,
sin emitir sonidos,
sin pronunciar palabras…
Y esos ojos que me observan,
se clavan en mi alma,
buscando la señal,
que le devuelva la calma…
Y mientras río,
lloro,
sueño,
anhelo…
Desde la penumbra,
sus ojos miran…
intentando saber como es mi alma.
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